Cada día los estudiantes arriesgan sus vidas cruzando endebles puentes para poder asistir a clases.
Miguel Santamaría
| Chiriquí, DIAaDIA
La falta de luminarias, caminos de penetración en mal estado, viviendas inseguras y un centro de salud sin medicamentos, son algunas de las deficiencias que padecen los residentes de la comunidad de La Victoria, en el corregimiento Rodolfo Aguilar Delgado, distrito de Barú.
"A pesar que se han hecho las gestiones con las empresas de electrificación, no se ha colocado ni una sola lámpara en las calles", expresó Marvin Torres, educador de un centro educativo del área.
En esta comunidad viven alrededor de mil 200 personas, que en su mayoría son de escasos recursos económicos y no cuentan con trabajos fijos.
Manifiestan los moradores, que durante la época lluviosa las vías se vuelven impenetrables, lo que dificulta la salida de las personas hacia otros puntos de la provincia.
Aunado a la falta de buenos caminos, los estudiantes y residentes en general, tienen que utilizar puentes improvisados hechos de cañazas y troncos de madera para llegar a los planteles educativos o a otros destinos.
De igual forma, algunas familias viven en casas cuyas estructuras fueron afectadas por los fuertes temblores que se han registrado en el área.
"También el centro de salud de nuestra comunidad carece de medicinas y médicos. Las autoridades de Salud todavía no se han acercado para conocer nuestras necesidades", agregó Torres.
POBLACION
Unas mil 200 personas viven en la comunidad La Victoria, corregimiento Rodolfo Delgado, distrito de Barú.