"Mamá dame un cuara para ir a la tienda con mi abuelito", fueron las últimas palabras que Kiriam González Murillo, de 4 años, le dijo a su madre.

"Tenía puesto un suéter crema, pantalón amarillo y estaba peinada con unos moñitos", dijo Walkiria Murillo, madre de la menor.

Kiriam salió de su casa, ubicada en Cabuya de Tocumen, acompañada de su abuelo Régulo Murillo y su primita, de 5 años, Yasuani Valdivia. Eran cerca de las 6: 10 p.m. del lunes cuando, luego de botar la basura, se dirigían a la tienda. "Me pidió la plata, pero yo no tenía, así que la abuela sólo le pudo dar cuatro centavos y fue a comprar sus chicles", dijo entre llantos Walkiria, quien agregó que "era demasiado alegre mi bebé".

LA TRAGEDIA

Cuenta Walkiria que cuando se dio el hecho, el señor Régulo llevaba de la mano a las dos niñas. Fue entonces cuando el auto Yaris, color blanco y con placa 416875, conducido por Tomás Anel Herrera, de 29 años, se salió de la vía, arremetió contra los tres y lanzó a Kiriam contra un camión.

Testigos afirman que Herrera estaba en estado de embriaguez, y lejos de responsabilizarse por lo ocurrido, intentó darse a la fuga, pero los vecinos se lo impidieron. Las tres personas que lo acompañaban sí lograron irse.

Rápidamente Kiriam fue trasladada en un taxi para que recibiera atención médica, pero no pudo llegar a tiempo a la Policlínica J.J. Vallarino de Juan Díaz, pues murió en los brazos de su abuelo.

En tanto, Yasuani y el señor Régulo recibieron leves golpes y raspones.

AMENAZAS

Por si fuera poco, familiares de la niña aseguran que cuando estaban en la garita de policía llegó el testigo a declarar y el hermano de Herrera, en tono amenazante, le dijo: "así que tú vas a declarar en contra de mi hermano, juega vivo".

Sin embargo, familiares de la pequeña le piden a las autoridades que se les haga justicia y que encarcelen a Tomás Herrera.

ERA UN ANGEL

Kiriam cumplió sus cuatro añitos el pasado 8 de agosto. Era la primera de dos hermanitas.