Oscar Navarro es un hombre con deseos de superarse. Trabaja en la calle, vendiendo pinturas al óleo desde hace dos años, recorriendo todo el día diversos puntos de la ciudad capital.

Dijo que trabaja con otras personas, que son los que pintan los cuadros; otros enmarcan y todos salen a venderlos simultáneamente.

Todos los días sale a la calle en busca del sustento diario.

Agregó que las pinturas son de artistas colonenses, coclesanos, Kuna Yala, y hasta peruanos. Lo cierto es que todos reflejan en su trabajo el folclor y tradiciones de nuestro país.

Dijo que, muchas veces, va a las barriadas y visita las casas, donde siempre logra que un buen cliente le compre una; además de que brinda facilidades de pago.

El negocio, como en todos lados, resulta bueno, más cuando se trata de quincena.

Vive con su esposa y sus hijos, a los que mantiene siempre presente cuando lo golpea la dura realidad económica del país.

Muchas de las pinturas que le compran los clientes, se las lleva para los Estados Unidos.