Un día de ensayo y error. Un sector de los servidores públicos experimentó ayer un cambio de horario laboral al entrar a las 7: 30 a.m, que para unos fue positivo y para otros catastrófico, hasta el bus los dejó.
Esta es parte de la primera medida para reducir mensualmente el 14 % del consumo de energía por el sector público y, además, asegurar un menor consumo de combustible por vehículo al descongestionar las horas picos, de 6: 00 a 8: 00 a.m y de 4: 45 a 6: 45 p.m.
Alfredo Berrocal, secretario general de la Federación Nacional de Servidores Públicos (FENASEP), destacó que hizo un monitoreo y detectó que a las 6: 15 a.m. hubo un tráfico fluido.
Además, se percató de que los buses colectivos llevaban usuarios de pie, lo que significa que los trabajadores respondieron al llamado "compatible", con el sondeo previo que arrojó que el 87% de la gente estaba dispuesta a entrar más temprano.
¿CAMBIO, CUAL?
Para Any García, que viaja a diario de Cerro Viento hasta su trabajo en Ancón, el tranque estuvo igual, máxime cuando coincidieron con los trabajadores de la construcción y los estudiantes.
"La gente venía de pie y otros se quedaban en las paradas, hay que ver ahora este punto", dijo.
En tanto, Dionel Broce, de la piquera de Pedregal, dijo que el tráfico estuvo mejor y entre las 7: 30 a.m. a 7: 40 a.m. salieron rápido. Por su parte, hará un sondeo para ver si el servicio es eficiente a esas horas y que nadie se quede.
POLITICAS
FENASEP dice que el 31 de diciembre, cuando termine la medida y funcione, se adoptarán políticas de forma permanente.
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