¡Uyuyuy! Aunque Tiziano Ferro, a su arribo a la Ciudad de México, trató de evadir a la prensa saliendo por otra sala a la que había sido asignado, no lo logró. Como leen señores, a pesar de su intento por escabullirse, la prensa lo sorprendió y aunque el personal de la disquera EMI Music dijo que no emitiría comentarios, Tiziano no tuvo opción ante los cuestionamientos y se disculpó con las mexicanas por haberle dicho bigotudas hace meses.

Entre empujones -pues en ningún momento se detuvo-el intérprete de Tardes Negras dijo estar arrepentido por sus comentarios y aceptó sentirse muy nervioso. ¡Ay madre!