Los residentes de las Guías de Oriente, en Antón, están preocupados porque el "tramo de la muerte" no tiene hombros ni aceras y se ha convertido en una trampa para los transeúntes, por lo que solicitan al Tránsito más vigilancia.
Según los residentes de esta comunidad que se encuentra justo frente a la vía Interamericana, es peligroso para ellos caminar por la carretera porque, aunque vayan por la orilla, los conductores imprudentes se salen de la vía y atropellan a quien transite por el lugar, luego nadie se hace responsable, como ha ocurrido en ocasiones.
Mariela Hernández, moradora, dijo que es necesario que se nombre a una unidad de Tránsito permanente en este tramo para evitar que los vehículos pasen a exceso de velocidad y de esta manera, la gente pueda caminar por la orilla sin el peligro de que un conductor acabe con su vida.