En toda relación de pareja van a surgir momentos de tensión; sin embargo, no se debe permitir que esto se convierta en el pan nuestro de cada día. La convivencia puede resultar difícil para ambos, pero hay ciertas mañas femeninas que son el principal punto de conflicto, como el control, las exigencias y comportamientos absorbentes. Si siente que algo en su relación está fallando, lea lo siguiente y determine si hay algo por corregir:
Hay que respetar la intimidad: Aunque el sexo no es lo más importante en una relación, los hombres resienten mucho el "no". Si desde el principio se mostró como una mujer coqueta en ese aspecto, no lo descuide, trate de mantener la misma calidad de intimidad que mostró al inicio de la relación. Si comienza a inventar pretextos para eludir su responsabilidad, su pareja se sentirá decepcionado. No acose a su pareja: La confianza es la base de toda relación. Una de las principales quejas masculinas surge del constante interrogatorio al que se ven sometidos por parte de sus compañeras: ¿De dónde vienes? ¿Por qué demoraste tanto? ¿Con quién estabas? Simples preguntas que pueden romper la armonía al instante. Déjelo descansar: Los hombres son muy comprensivos con el tema de las labores domésticas, pero procure no interferir con sus horas de descanso. Quiéralo: No dude en mostrarse tierna y ofrecer mimos y afectos a su chico, aunque no lo crea son muy importantes para él.
|