Dr. Denis Cardoze ([email protected])
| Psiquiatra de niños y adolescentes
«Grupo de trastornos caracterizados por un comienzo precoz, la combinación de un comportamiento hiperactivo y pobremente modulado, con una marcada falta de atención y de continuidad en las tareas».
El tratamiento de los niños y adolescentes con TH abarca varias modalidades:
LA MANIPULACION DEL AMBIENTE
Tanto en el ambiente escolar como en el doméstico, va dirigida a reducir la cantidad de estímulos distractores y facilitar el niño la concentración en sus tareas y estudio. Es de preferencia que estén en aulas de pocos alumnos, con iluminación adecuada, sin ruidos u otros estímulos auditivos que no sean los de la voz del maestro, colocados en filas delanteras y no al lado de otro hiperactivo o mal portado, y de espalda a las ventanas si las hay. En la casa la habitación donde hace sus deberes el niño hiperactivo, debe pintarse con colores no brillantes, no tener música o encendida la televisión, y los juguetes no deben estar a la vista.
Naturalmente, debe estudiar en un lugar de la casa donde no estén circulando personas o entren muchos ruidos de la calle. Lamentablemente estas condiciones no se podrán lograr en hogares pobres que solamente cuentan con poco espacio y el aislamiento es imposible. Igual sucede en escuelas donde la cantidad de alumnos y el poco presupuesto impide tener aulas con grupos reducidos de alumnos y condiciones físicas adecuadas.
LA ORIENTACION A LOS FAMILIARES
Consiste en darles información completa y clara sobre la naturaleza de los TH y sus consecuencias; enseñarles lo relacionado con la manipulación del ambiente, la metodología de estudio en estos casos, la disciplina y la corrección de otros
factores familiares que puedan agravar la situación del hiperactivo. Habrá casos en los que se tenga que referir la familia a terapia cuando exista una dinámica familiar disfuncional. La información que se dé a los familiares, además de clara, no debe propiciar en ellos la actitud sobreprotectora, ni tampoco una actitud pesimista.
LA TERAPIA INDIVIDUAL
O sea, el trabajo psicológico con el niño hiperactivo dependerá para su modalidad de la edad y madurez cognitiva de aquél.
Sus objetivos son:
ayudar al niño a comprender su problema; evitar que se sienta estigmatizado o enfermo; elevar su autoestima si se requiere; inculcarle motivación por superarse; entrenarlo en el autocontrol mediante lo que llamamos terapia cognitiva y cognitiva- conductual; corregir, si los presenta, trastornos de conducta como agresividad frecuente, mentir, molestar a los compañeros o hermanos, actitudes negativistas u otros.
LA ORIENTACION PEDAGóGICA
Y la educación especial tienen que ver con todo lo relacionado a planes de estudio, horarios, metodología, adquisición progresiva de independencia académica, reforzamiento de materias donde el conocimiento aún es insuficiente. Los niños hiperactivos aunque son en cierto modo alumnos especiales, su ubicación no es en aulas especiales sino en las normales pero tratando de flexibilizar el programa, de modo que se pueda individualizar para adaptarlo lo más posible a su condición. Pretender que un niño con TH y déficit atencional vaya al ritmo de los que no presentan tal problema es querer tapar el sol con la mano y exponerse a someterlo a presiones contraproducentes.
Si se quiere cumplir con el compromiso de atender adecuadamente a estos niños, como a otros con diferentes problemas pero que tienen que estar integrados o incluidos en salones regulares, no queda otro camino que preparar los programas y los docentes para tal fin. Los maestros especiales pueden intervenir dando al estudiante algunas horas individuales en la escuela o en la casa, pero siempre en coordinación con los maestros regulares.
INFORMARSE
Los padres y familiares deben informarse sobre el TH, conocer los síntomas y cómo enfrentarlos. Los padres no deben tener una actitud sobreprotectora, ni pesimista.
LA MEDICACION
Es parte importante del tratamiento cuando los síntomas no mejoran con las otras modalidades y la situación se torna muy difícil para el niño y su familia.
En algunos casos se requerirá más temprano que en otros.
Las condiciones para dar el medicamento las enumeramos así:
Que no sean suficientes los otros métodos de tratamiento y la conducta empeore o sea incontrolable. Que las calificaciones vayan deteriorándose progresivamente. Que no hayan contraindicaciones médicas. Que padres o tutores responsables del menor la acepten después de haberles dado las explicaciones pertinentes sobre su acción y efectos secundarios. Que se dé al paciente las explicaciones acerca de la necesidad de tomarla. Que exista un correcto y frecuente control médico sobre los efectos del fármaco.~