Quiere trabajar


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Celedonia explicó que hay un tratamiento para su hijo, pero sale muy caro. Fotos: CAROLINA SÁNCHEZ

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    Celedonia explicó que hay un tratamiento para su hijo, pero sale muy caro. Fotos: CAROLINA SÁNCHEZ

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    Ella no se queda quieta haciendo oficios en su humilde casa.

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    Necesita un techo para su vivienda.

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    Ella no se queda quieta haciendo oficios en su humilde casa.

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    Necesita un techo para su vivienda.

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    Ella no se queda quieta haciendo oficios en su humilde casa.

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    Necesita un techo para su vivienda.

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    Ella no se queda quieta haciendo oficios en su humilde casa.

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    Necesita un techo para su vivienda.

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Carolina Sánchez P. - DIAaDIA

A sus 69 años pide la oportunidad de trabajar. Celedonia Reyes viajó desde hace años de La Palma de Darién hacia el sector de Plaza Colombia en San Miguelito, junto con su esposo. Con el tiempo, ella quedó viuda y sola con su hijo Elibardo Sánchez, de 39 años, quien desde que era bebé padece de ataques de epilepsia y es como un niño grande, pues sufre una discapacidad mental.

Al llegar a su vivienda, ella estaba afuera rodeada de un tendedero de ropa que sacó a solear, como allá en el campo; mientras, Elibardo estaba muy cerca sentado en unas raíces de un árbol de mango.

Esta cansada madre manifestó que pasan mucho páramo, pero que está dispuesta a limpiar casas y planchar ropa para ganar dinero para la comida de su hijo, a quien no quiere dejar solo, pues en todo momento puede darle un ataque.

“Por día hago una libra de arroz para los tres golpes y comemos pan sin más nada en el desayuno”, dijo Celedonia, cuya casa es de madera y el zinc está lleno de huecos y cuando llueve todos sus enseres se mojan.

Los vecinos de la comunidad solicitan al Ministerio de Desarrollo Social le ayude a ingresar a Elibardo al programa de “Ángel Guardián” para personas con discapacidad.

 
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