Llenaron la Plaza Figali

No hay duda, el concierto “Gigantes 2” de Marc Anthony y Chayanne, y que tuvo como invitados al colombiano Fonseca y cinco participantes de Vive la Música, estuvo genial. Casi 12 mil personas asistieron a la Plaza Figali para deleitarse con más de dos docenas de canciones.

Empezó frío

A las ocho de la noche, los participantes de VLM invadieron la tarima, lastimosamente miles de personas no habían entrado, así que los aplausos fueron nulos. Pero bueno, nadie les quita lo vivido. Ellos presentaron las mejores interpretaciones que han tenido en el programa.

El sabor colombiano

Luego de un receso y cuando el reloj marcó las 9:15 p.m. salió a escena Fonseca, quien interpretó siete canciones, entre esas “Te mando flores”, con la que inició, y cerró con “El arroyito”. ¡Jo, los colombianos las cantaron toditas!

El meneo boricua

Por supuesto que el Figali se prendió cuando salió el puertorriqueño Chayanne, quien desde que empezó no dejó de bailar. “Boom, boom” marcó el inicio de su presentación que abarcó 13 canciones, entre las que figuraron “Tu boca”, “Salomé”, “Tu pirata” y por supuesto, “Si nos quedara poco tiempo”. Genial su interpretación. ¡Ah! ¿saben qué?, muchos esperaban el tema “Candela”, la que le escribió Erika Ender, pero que va, no estaba en la lista. ¡Pluff!

El “show” del boricua fue de una hora en la que sobresalieron los remeneos, el sudor y los “Te amo, Chayanne”. La verdad que a la gente le fascinó, aunque para mí, le faltó.

El rey de la noche

No hay duda de que el plato fuerte de ese concierto fue Marc Anthony. A pesar de que solo cantó 8 temas y dos a dúo con Chayanne, envolvió a los panameños y miles bailaban hasta más no poder. “Valió la pena” fue la canción que puso a la gente eléctrica para iniciar con la bailadera. Nadie descansó y por supuesto que tampoco cerraron la boca, ya que casi todas las personas cantaban las canciones. “Y hubo alguien”, “Hasta ayer”, “Y cómo es él” en balada fueron algunas de las melodías que interpretó. No dejó por fuera “Tu amor me hace bien”. Con esa canción los enamorados se abrazaban y se daban sus bembazos. ¡Humm!, no hay quejas.