Iban preparados para cubrirse el rostro. El enfrentamiento duró dos horas. (Foto: ROBERTO BARRIOS / EPASA)
Carolina Sánchez y Milagros Murillo F.
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Destrozos, vandalismos y robos fue lo que hubo en la protesta protagonizada por estudiantes del Instituto Nacional (IN). Eran las 10:00 a.m., cuando un grupo de 300 aguiluchos aprovechó el tiempo del recreo y cerró la Avenida de Los Mártires.
Los estudiantes, que cubrían sus rostros con máscaras y suéteres, tiraban piedras, bloques, botellas y cualquier objeto que se encontraron en el paso, incluyendo algunos materiales de la enfermería, el laboratorio de inglés y la biblioteca, que fueron vandalizadas.
En un intento por cerrar las arterias colindantes a la Avenida de Los Mártires tomaron los conos que el Tránsito había colocado en las calles, para el cambio de carriles en la mañana. No habían pasado 20 minutos cuando las Unidades del Control de Multitudes (UCM), llegaron al lugar, donde los recibieron con piedras, éstos respondiéndoles con las bombas lacrimógenas que pusieron a "moquear" a más de uno, pero que dispersaron a los manifestantes que se amotinaron en el plantel.
PERO, ¿QUE PELEABAN?
Según explicó Petra Serracín, directora regional de Panamá Centro, al parecer la protesta de los estudiantes fue por la renuncia del rector Abel Zeballos el pasado viernes. "Él profesor renunció por motivos personales a parte que es supervisor Nacional encargado", dijo la representante del Ministerio de Educación (MEDUCA), quien agregó que la profesora Emelda Guerra actual vicerrectora quedó encargada del colegio, lo que generó descontento en la población institutora.
DAME QUE TE DOY
Fuera del plantel, un grupo de trabajadores y padres de familia veían cómo la UCM se enfrentaba a los estudiantes que no paraban de lanzar objetos. Fue entonces que Franco intentó mediar la situación e incluso se les dio un plazo de media hora para que salieran del IN, pero éstos se negaron y continuó el combate.
Más tarde, a eso de las 12:15 m.d. cuando se estudiaba la posibilidad de ingresar para evitar más daños, una enfurecida madre de familia se interpuso y abrió la puerta principal, momento que fue aprovechado por los aguiluchos que salieron en estampida. Sin embargo, 15 de ellos, la madre de familia y otro acudiente fueron retenidos y llevados a una subestación de Policías.
Ahora queda cuantificar los daños, buscar a los responsables y sancionar, expresó Franco.
CERRADO
Las clases en el Nido de Águilas fueron paralizadas indefinidamente. Los exámenes bimestrales hasta segunda orden.