El hecho de introducir objetos para sacarse la cera tiene tres grandes consecuencias.
Deja desprotegido al oído, puesto que la cera actúa como anticuerpo en el área del conducto auditivo.
El material incrustado puede causar lesiones que ocasionan picazón, y al rascarse se levanta la piel delicada provocando fuertes dolores, e infecciones.
Al tratar de sacar el sucio, lo que provoca es hundirla más y, sin darse cuenta, se transporta al tercio interno del oído.
VIGILANTES
Los padres de familia deben estar pendientes de los niños, que al realizar una que otra travesura tienden a jugar con lápices e introducirlos en el oído y hasta en la nariz, pudiendo provocar una tragedia.