Fuera de todos los pronósticos de que no llegaría al año de casado, Emilio Regueira celebró ayer junto a su esposa María Eugenia, la hija de ella y sus hermanos, su primer aniversario. En ese almuerzo familiar, todo era amor, hasta un poquito más y los corazoncitos salían de la cabeza de los tórtolos, pues ambos manifiestan que aún siguen enamorados como el primer día.

Sí amigos, el amor es tan grande en estos dos azuerenses, que Emilio nos contó que ha cambiado mucho durante el año de matrimonio, ejemplo de eso es que ahora solo bebe vino, nada de seco, ron, ni nada de eso. Además, junto a su esposa ha emprendido muchos negocios en los que le va muy bien, y como si fuera poco, considera que su carrera está más sólida. ¡Mira tú!

Imagínense que Emilio está tan contento con su matrimonio, que hasta hace poco le compró una mansión a su esposa y hasta una finca y todo. ¡Qué bien!

¿QUE LE REGALO?

Nos enteramos de que el chitreano no dejó pasar por alto la fecha y le regaló joyas de oro blanco.

Por otro lado, está tan contento con su esposa, que hasta a la hija de ella le hizo tremendo regalo, ya que dentro de días cumplirá.

Y escribiendo de la pequeña, ya nos dimos cuenta de que será la imagen de unas chancletas y que pertenece a una agencia de modelos, así que no se extrañen de que la vean en cuñas comerciales y esas cosas por allí. ¡Así se hace!