
Nelly Santa Cruz está orgullosa de lo que hace porque quiere salir adelante.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Nelly Santa Cruz está orgullosa de lo que hace porque quiere salir adelante.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Nelly Santa Cruz está orgullosa de lo que hace porque quiere salir adelante.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Sus galletas son de mucha calidad.
También vende suéteres.
Tiene variedad de galletas.
La gente le compra sus ricas galletas.
Nelly Santa Cruz está orgullosa de lo que hace porque quiere salir adelante.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Sus galletas son de mucha calidad.
También vende suéteres.
Tiene variedad de galletas.
La gente le compra sus ricas galletas.
Nelly Santa Cruz está orgullosa de lo que hace porque quiere salir adelante.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Sus galletas son de mucha calidad.
También vende suéteres.
Tiene variedad de galletas.
La gente le compra sus ricas galletas.
Nelly Santa Cruz está orgullosa de lo que hace porque quiere salir adelante.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Sus galletas son de mucha calidad.
También vende suéteres.
Tiene variedad de galletas.
La gente le compra sus ricas galletas.
Nelly Santa Cruz está orgullosa de lo que hace porque quiere salir adelante.
Fotos: ROBERTO BARRIOS
Sus galletas son de mucha calidad.
También vende suéteres.
Tiene variedad de galletas.
La gente le compra sus ricas galletas.
Una chica innovadora. A sus 25 años, Nelly Santa Cruz no repara en ganarse el sustento de su hogar vendiendo galletas y suéteres, de manera honrada.
Esta joven de sonrisa agradable, dijo que fundó el Grupo “Gams Chiks”, que no es más que un grupo de chicas “gamers” (jugadoras de videojuegos) que se unieron para jugar Nintento, Playstation y Game box online.
Un día, se le ocurrió recoger fondos para el grupo, y aprendió una receta para hacer dulces, brownies (pastel de chocolate pequeño), galletas, hasta que fue perfeccionando la técnica y ahora, hace dulces muy deliciosos. Los hace de todas las formas, dibujos animados, temas de videojuegos, etc.
Santa Cruz proviene de una familia muy unida, tiene dos hermanos, y siempre ha sido una chica visionaria y con metas claras en la vida, por eso no le da pena vender sus galletas en todos los eventos que se hacen en Panamá.
La gente la busca siempre y le encarga las galletas, si las requieren para algún evento en particular. Para ella, lo más importante es que la gente sepa que sus productos están hechos con mucho cuidado.
La receta la aprendió de su abuela, quien con mucho cariño, un día le dijo que uno debe buscar sus sueños y su sustento de una manera digna.
“Cuando sabemos lo que queremos debemos empezar por algo siempre y buscar nuestros sueños”, dijo con mucho orgullo, pues para esta talentosa chica, empezar su negocio ha sido una bendición.
Por su experiencia, aconseja a los jóvenes que utilicen su tiempo en actividades sanas, ya que siempre que se quiere, se puede.
Su secreto ha sido darle un toque muy femenino, lo que hace que las galletas se vean extremadamente deliciosas, a la vista del consumidor.