Las autoridades costarricenses están haciendo planes para cuando regrese María José Castillo como la Ídolo Latinoamericana 2008. Por lo menos eso es lo que he podido escuchar durante mi estadía en el hermano país.
No se sabe cuál sea el resultado de esta competeción, "Latin American Idol", pero ya los ticos están organizando los escenarios para la primera presentación de María José. Para ello, las autoridades tienen previsto el Teatro Nacional y los músicos de la Orquesta Sinfónica. Aún no se ha determinado el repertorio que cante la hasta el momento finalista del concurso, que mantiene a las dos naciones en actividades para prepararse para el momento de las llamadas, pero de que se están organizando, lo están.
Bueno, al parecer no fue suficiente que el presidente Óscar Arias visitase por varias horas a la familia de la chica de 18 años recién cumplidos, que compite con la panameña Margarita Henríquez, de 17 años de edad.
Se los digo porque pese a todo el esfuerzo de las autoridades, Presidencia y Ministerio de Cultura y Juventud, al declararla "de interés cultural", los ciudadanos de la calle no muestran mucho entusiasmo por este acontecimiento.
También les puedo contar que si en Panamá vemos a los panameños trabajando como hormigas, haciendo actividades en apoyo a la santeña, en Costa Rica el domingo, pese a que fue una tarde nublada, el equipo de apoyo de María José realizó un concierto con artistas nacionales y recolectaron dinero en alcancías en el Mall Paseo de las Flores.
Un detalle del movimiento costarricense es que las empresas -desde pizzerías hasta compañías que venden autos- están donando parte del costo de los productos para las llamadas, y también se han habilitado cuentas en bancos para las residentes en el extranjero.
Como ya se ha mencionado, el Presidente, en un mensaje que transmiten por algunos canales de televisión, destaca que "has -refiriéndose a María José- puesto en alto la música, eres la embajadora de nuestros sueños, pedimos a Dios por vos, cántale a este pueblo que te mira y que te quiere, todos a votar enviando un mensaje...".
Qué más les puedo decir, la fiebre de Latin es fuerte, muy fuerte, pero definitivamente que nadie se puede confiar.