Lo que sobró fue felicidad. (Foto: Anayansi Gamez / EPASA)
Diamar Díaz Nieto
| DIAaDIA
Araceli Gaitán es una dulce niña que ama las Barbies y a Winie de Poo. Su vida transcurre adorando el gran chorro que hay cerca de su casa en Las Palmas de Veraguas, y jugando con sus amiguitas y hermanito.
Pero ella es una peque nada común. Araceli se ha ganado el corazón de todos los que la conocen gracias a su gran fortaleza que la ha hecho batallar contra un cáncer, que a pesar de ser agresivo no la ha privado de sus deseos de soñar con hadas, princesas y hasta con tiburoncitos.
Y fue precisamente ese anhelo el que se le convirtió ayer en realidad, pues la niña quien es fiel fanática del Comando Tiburón los pudo conocer, gracias a la buena voluntad de estos artistas que se acercaron al hogar que tiene la Fundación de Amigos de los Niños con Leucemia y Cáncer (FANLYNC), donde ella se hospeda.
¡SORPRESA!
Horas antes sin tener la mínima sospecha de este acontecimiento, Araceli tenía su ánimo bajo. Su abuela Evangelina le tocaba la frente para disipar cualquiera duda de fiebre.
Todo este panorama cambió cuando tuvo frente a frente al Comando. Sus ojos se iluminaron como dos luceros cuando vio a Flecha, Rolo y Phantom.
Enseguida Araceli se lanzó en los brazos de Rolo y cantó junto a ellos un fragmento del tema Blackberry Adicta.
Los tres interpretes la acompañaron hasta al comedor seguida por otros niños quienes no creían que tan importante acontecimiento se estuviera dando esa tarde, tan complicada por la falta de agua en casi toda la ciudad.
Y precisamente eso fue lo que le pasó a Rolo, quien se vio en dificultades porque ante la falta del líquido tuvo que irse a bañar en un residencial en Bella Vista para no faltar a la cita.
Phanton la instó a pedir un deseo, y ese era un Ninento DS -2, la niña apretaba sus ojitos fuertemente y cuando los abrió, ¡Sorpresa! lo que había pedido se convirtió en una realidad. Araceli no contuvo el llanto y abrazó a su "abue".
Y ahí no terminaron las alegrías, le anunciaron que también tendría la camita que tanto había querido, regalo que les fue dado por la gente de la emisora Wao.
Para compartir tantos momentos gratos, los chicos del Comando Tiburón cantaron alrededor de tres cakes que le llevaron, y a falta de cumpleañeros hicieron un festejo simbólico sin que dejar de meterle ese feeling tan especial que tienen estos chicos.
En medio de tanta felicidad Rolo nos confesó su satisfacción por haber compartido con Araceli, y es que el saber que una infante los tenga entre sus artistas favoritos, es más gratificante que hasta la misma gloria y fortuna.
"Un niño que escucha en la radio artistas nacionales y extranjeros, y que en medio de tanta enfermedad prefiera conocerte a ti que a un Daddy Yankee, o una Shakira, es algo maravilloso. Esto es mejor que los viajes, que la fama y el dinero", exclamó el Tiburón Mayor en medio de un largo suspiro. ¡Ya tú sabes quienes son!