Con la inocencia reflejada en sus ojos y una visible timidez, Roberto Hernández llegó en brazos de su madre a las instalaciones de EPASA, en donde fue recibido con algunos presentes donados por los empleados de la empresa.

Roberto, quien sólo cuenta con cinco años de edad, sufre de un tumor canceroso que le afecta su oído izquierdo desde hace un año y es tratado con quimioterapia en la Fundación de Niños con Leucemia y Cáncer.

Yariela Brooks, la madre de Roberto, dijo: "Les pido a todos que caminen y que cooperen con esta noble causa, ya que es una bonita experiencia que se vive y que por medio de ella se ayuda a bastantes niños que lo necesitan". Con la participación de todos, se brinda apoyo y esperanza a muchas familias panameñas que pasan momentos difíciles con hijos que sufren esta enfermedad.