Había terror en Nueva York. Los Yanquis se jugaban la vida anoche ante unos hambrientos Indios de Cleveland, y ante la mirada de un George Steinbrenner listo para hacer rodar la cabeza de Joe Torre en caso de que quedaran eliminados.

Sin embargo, los Yanquis despertaron y el capítulo de pánico terminó con un final feliz, cuando derrotaron 8 carreras por 4 a los Indios, para mantenerse con vida en la serie de división de la Liga Americana.

La alegría en el Yankee Stadium comenzó a reinar a partir de la parte baja de la quinta entrada, cuando Johnny Damon bateó un cuadrangular con dos en base, que volteó un marcador y le dio la ventaja a los Yanquis por tablero de 5-3.

Antes de la reacción de los Yanquis, los Indios habían castigado al abridor Roger Clemens con tres carreras y tres imparables, entre ellos un jonrón, en 2.1 entradas.

Clemens le dio paso a Phil Hughes, quien no aceptó carrera en 3.2 capítulos, con dos hits y cuatro ponches, para apuntarse el triunfo.

Cabe mencionar que en el sexto episodio los Yanquis anotaron tres carreras, para poner el juego 8-3.

Con esa ventaja, entró a relevar Joba Chamberlain, quien se encargó del séptimo y octavo tramos, aceptando una anotación antes de permitirle la entrada al panameño Mariano Rivera.

Como es costumbre, Rivera sacó los tres últimos "outs" del partido, recetando dos ponches.