Moza, tus consejos me encantan y espero que me des uno a mí.

Moza, me llamo Cecilio y creo que la vida me está tratando demasiado duro, por eso, ya no sé qué hacer.

Soy un hombre casado con una mujer que tiene mi misma edad , ella no tiene trabajo fijo, pero sí hace muchos camarones, con lo que consigue suficiente dinero. Ambos tenemos dos preciosos hijos a quienes amo, pero antes de casarme con ella, tuve una relación con una mujer con quien engendré, una niña a quien amo. Con mi ex pareja, terminé, porque ella me estaba quemando y al parecer, yo era el único idiota que no lo sabía. Cuando la vi en mi propia cama, quise matarla, pero no fui tan fuerte y eso me causó un desequilibrio por muchos años.

Moza, cuando creí que había superado eso y que había conocido la mujer de mi vida, pues me casé, tuve dos hijos y todo iba bien, me entero que mi hijo, el más chico no es mío, porque mi esposa tuvo una relación extramarital con su ex. Eso me destrozó el alma, ella me lo dijo, porque nuestro hijo sufrió un accidente y estuvo entre la vida y la muerte. Como necesitó sangre, su verdadero padre se la tuvo que donar. Creí que me moría y también quise matarla, pero tampoco tuve valor. Me fui de la casa y después de casi un mes regresé, porque ese mismo niño, que es para mí, mi hijo, estaba muriendo de cabanga. El mundo es tan pequeño, que él que no es mi hijo, me ama más que aquellos dos que lo son.

Moza, ella me pidió perdón, lo acepté, pero vivo con ese dolor por dentro y estamos tratando de convivir juntos, aunque no hemos podido volvernos a amar más. Llevamos 3 meses así. La amo, pero me duele lo que hizo hace 5 años. Mi pregunta es: ¿Crees que hago bien siguiendo a su lado?

Hasta pronto.

NO PUEDES VIVIR CON ODIO

Hola Cecilio, voy a ser sincera. Uno no vive con alguien a quien no perdona, pues jamás podrá ser feliz. Lo que te aconsejo es que busques ayuda profesional y si en verdad después de asistir a esa terapia, en compañía de tu pareja, puedes superar las cosas, entonces sigue a su lado. Si no es así, tendrás que tomar una decisión que será la más saludable para ambos. Si por tus hijos te diste esa oportunidad, inténtalo, si no funciona, tendrás que tomar una decisión. ¡Suerte!