Lo que iba a ser una noche de miedo, se convirtió en una noche de torturas. El famoso Palacio de Gugenheim, mejor conocido como la Casa del Terror, se ha visto envuelto en una polémica, después de que un joven de 23 años denunciara que había sido agredido allí, por uno de los trabajadores del lugar.

LO GOLPEARON

Onésimo Gómez, quien fue a una de las tandas la pasada noche del sábado, terminó con el tabique de la nariz fracturado y múltiples golpes. Según contó el joven, casi al final del recorrido, un hombre lo empujó fuertemente contra la pared.

Luego de quejarse por la agresión, dijo haber sido golpeado por la misma persona con una barra de hierro en la nuca. Onésimo se volteó y le quitó el suéter que tenía puesto para cubrirse el rostro. Ante la reacción, el sujeto volvió a pegarle, esta vez en la cara, atinando a darle en la nariz. Aunque pidió hablar con el encargado del lugar, Onésimo asegura que lo "largaron". Inmediatamente, corrió a buscar atención médica al Hospital Santa Fe, donde le hicieron una cirugía reconstructiva de la nariz. También tíene lesiones como de varillazos en la nuca.

Onésimo presentó una denuncia por lesiones personales en la PTJ y ante el Ministerio Público.

DEFENSA PROPIA

DIAaDIA habló con Roberto Díaz, representante del Palacio de Gugenheim, quien nos explicó que desde el principio Onésimo mostró una actitud de "macho man". De acuerdo con la versión de Díaz, el incidente ocurrió cuando el actor del espectáculo le estaba mostrando la salida a Onésimo, y éste le agarró la mano al encargado del lugar y le quebró el dedo anular izquierdo. Como medida de defensa, el actor le dio un puñetazo en la cara. Díaz descartó que Onésimo haya sido golpeado con una barra de hierro.

El encargado nos dijo que, en efecto, se han recibido varias quejas, pero que se trata de personas que no entienden la dinámica del recorrido. "Nosotros cuidamos mucho que el show nunca pierda la calidad de emoción fuerte", dijo. Igualmente, explicó que antes de entrar a cada persona se le hace firmar un papel, donde exime de responsabilidades a los organizadores del evento.

CIRUGIA

Onésimo pagó 3 mil dólares para que le reconstruyeran la nariz, luego de haber sido golpeado dentro de la Casa del Terror.