Mantiene la misma línea. La magistrada Graciela Dixon, que fue elegida ayer como presidenta de la Corte Suprema de Justicia para el periodo 2006-2007, dijo no estar de acuerdo con que se eliminen los privilegios de combustible y exoneración de impuestos en la compra de autos a los magistrados, propuesta hecha por la procuradora Ana Matilde Gómez.

Dixon afirmó que "eso es parte del salario, parte del problema es qué es y por qué es, de qué manera eso hace parte del ingreso que tienen los funcionarios", en referencia a los privilegios. Está abierta a conversar sobre el tema.

Le pondrá especial atención a la imagen del Órgano Judicial, indicando que trabajará para fortalecer la institucionalidad. Además, dejó claro que su compromiso es ejecutar los acuerdos alcanzados en el Pacto de Estado por la Justicia, en lo que tiene que ver con el acceso a la justicia por parte de la ciudadanía. Manifestó que puede ser mejorada la manera de funcionar de los tribunales. Prefiere fortalecer los procesos de mediación para resolver los conflictos, a fin de que las personas no tengan que optar necesariamente a litigios legales.