
El sabor es distinto.
El sabor es distinto.
Este es el caso del alimento pasteurizado y procesado para emparedados –tal como lo indica su registro sanitario- marca Dorado, el que en su etiqueta no se destaca como queso, pero se encuentra en la misma sección de los embutidos regulares.
Algunos comerciantes lo rebanan y etiquetan como queso, incurriendo en lo que Yakarta Ríos, presidenta de la Asociación de Consumo Ético, cataloga como publicidad engañosa y se tipifica claramente en la Ley 45 sobre los derechos de los consumidores.
Esto representa una pérdida para los consumidores, ya que se presume que es original, dijo Ríos, quien agregó que esta práctica va a cobrar más auge en el mercado, producto de la inflación en los precios, lo que impulsa a los consumidores a buscar productos más económicos, sin que antes se tome en cuenta la falta de calidad. “Es importante verificar que la etiqueta vaya acorde con los ingredientes”, acotó Ríos.