
Un equipo internacional de astrónomos ha logrado establecer por primera vez un cronograma de la era de la reionización, fase en el que la formación de las galaxias cambió el estado físico del hidrógeno en el universo, informó hoy el Observatorio Austral Europeo (ESO) desde su central en Alemania. Para estudiar el universo primitivo en el momento en el que se estaba volviendo transparente a la luz ultravioleta -hace aproximadamente unos 13.000 millones de años-, los científicos utilizaron el telescopio de largo alcance (VLT, por sus siglas en inglés) del ESO en Cerro Paranal (Chile).
Estas observaciones han permitido establecer por primera vez un calendario de la reionización y demostrar a partir del estudio durante tres años de algunas de las galaxias más lejanas detectadas hasta el momento, que esta breve pero espectacular fase en la historia cósmica tuvo lugar más rápido de lo que se pensaba. "Las diferencias entre las galaxias nos hablan de las cambiantes condiciones en el universo en este importante período, y la rapidez con que estos cambios fueron ocurriendo", señaló el científico Adriano Fontana, del Observatorio Astronómico de Roma del Instituto Nacional de Astrofísica (INAF) y líder del equipo.
La detección y observación del desplazamiento de la línea Lyman-alfa -una de las líneas de emisión de rayos ultravioleta más fuertes, y que proviene del gas de la hidrógeno- de cinco galaxias muy distantes permitió a los astrónomos medir con precisión la distancia de las mismas.
De esta manera, el equipo determinó que las galaxias se ven tal y como eran entre 780 millones y mil millones de años después del Big Bang, al tiempo que pudieron colocarlas en orden y crear así una línea de tiempo que muestra cómo su luz fue evolucionando en el tiempo. Además, los científicos pudieron ver hasta qué punto la emisión Lyman-alfa -proveniente del hidrógeno que brilla en el interior de las galaxias- fue reabsorbida por la niebla de hidrógeno neutro en el espacio intergaláctico en diferentes puntos en el tiempo.