Se logró obtener un pequeño margen de ganancia en esta primera etapa, que alcanzó los siete mil balboas. (Foto: Eric Montenegro / EPASA)
Eric Montenegro
| Cativá, DIAaDIA
Panamá logró enviar al mercado asiático el primer contenedor con algas marinas comestibles, que son cultivadas en el sector indígena de Cativá, en Colón, de forma artesanal, aunque en su segunda etapa, el proyecto contempla la instalación de una planta de tratamiento y empaque con inversión extranjera.
La alga marina es la Carragenina (hidrocoloide), que tiene una amplia demanda en el mercado asiático, indicó el encargado de la Misión Técnica de Taiwán en Panamá, Kevin Cheng, aunque aquí se trata de un producto que no es consumido.
Las algas son utilizadas como espesantes, gelificantes y estabilizantes; además de que en su forma natural es usada en laboratorios de cosmetología y en biomedicina.
Indicó que aún es limitada la cantidad de algas que se produce, a pesar de que el proceso de cosecha se realiza cada 45 días.
Gilberto Canto, de la dirección de Fomento y Asistencia Técnica de la Autoridad de los Recursos Acuáticos (ARAP), indicó que la primera fase del proyecto fue "un tanto experimental" y que abarcó desde la selección de la semilla hasta la exportación del producto.
En la primera fase del proyecto se lograron exportar 22.5 toneladas. El precio por tonelada de este producto en el mercado asiático oscila entre los B/700.00 y B/900.00.