
Logan, Kendall, James y Carlos son los BTR.
Fotos: Omar Morales
Logan, Kendall, James y Carlos son los BTR.
Fotos: Omar Morales
Logan, Kendall, James y Carlos son los BTR.
Fotos: Omar Morales
Las niñas esperaban ansiosas poder ver de cerca a los BTR.
Estaba decepcionada de dejar en el suelo el cartel que le tomó seis meses confeccionar.
Mónica Nieto no se podía perder este concierto.
Logan, Kendall, James y Carlos son los BTR.
Fotos: Omar Morales
Las niñas esperaban ansiosas poder ver de cerca a los BTR.
Estaba decepcionada de dejar en el suelo el cartel que le tomó seis meses confeccionar.
Mónica Nieto no se podía perder este concierto.
Logan, Kendall, James y Carlos son los BTR.
Fotos: Omar Morales
Las niñas esperaban ansiosas poder ver de cerca a los BTR.
Estaba decepcionada de dejar en el suelo el cartel que le tomó seis meses confeccionar.
Mónica Nieto no se podía perder este concierto.
Logan, Kendall, James y Carlos son los BTR.
Fotos: Omar Morales
Las niñas esperaban ansiosas poder ver de cerca a los BTR.
Estaba decepcionada de dejar en el suelo el cartel que le tomó seis meses confeccionar.
Mónica Nieto no se podía perder este concierto.
Logan, Kendall, James y Carlos son los BTR.
Fotos: Omar Morales
Las niñas esperaban ansiosas poder ver de cerca a los BTR.
Estaba decepcionada de dejar en el suelo el cartel que le tomó seis meses confeccionar.
Mónica Nieto no se podía perder este concierto.
¡Locas! se volvieron las chicas que asistieron al Centro de Convenciones Figali, a disfrutar del concierto del grupo juvenil Big Time Rush.
No habían entrado al edificio y ya estaban gritando de emoción, pero también se llevaron una decepción, debido a que estaba prohibido ingresar con cartelones, lo que les ocasionó tristeza el tener que dejar en el suelo lo que habían confeccionado con tanta ilusión, para lograr llamar la atención de su integrante favorito.
Pese a este inconveniente, las chicas disfrutaron al máximo las interpretaciones de BTR, en las que el ritmo, piruetas y bailes, no faltaron.
Y ni hablar de los gritos ensordecedores que envolvieron todo el Figali, al momento que salieron al escenario los cuatro chicos, quienes pese a no dominar el español, lograron interactuar fácilmente con los asistentes, en los que sobresalian niñas, niños y adolecentes, que disfrutaban mientras sus padres los esperaban fuera.
Canciones como su último sencillo “Windows Down” hicieron que todos saltaran de sus puestos, pese a la prohibición de hacerlo, es más, se podía sentir cómo se movía el piso con cada interpretación. Por otra parte, cantaron “ WorlWide” en español y subieron a tres chicas y una niña, de estas, a una, por poco le da algo de la emoción de estar cerca de su ídolo y ni hablar de cuando le dio un beso en la mejilla.
Para finalizar el evento de hora y media, los chicos se despidieron con el tema icono de la serie de Nickelodeon “Big Time Rush”. Ellos interpretaron 21 temas, en una hora y quince minutos.