La tenista rusa Anna Kournikova y el español Enrique Iglesias no se pueden ver ni en pintura, porque los invaden las ganas de estar juntos. Ahora, nuevamente son el foco de atención de los medios, ya que protagonizaron el fin de semana pasado una escena ardiente y caliente en una playa de México. Imagínense que la tenista tenía un bikini casi al descubierto encima del cantante en un enredo de brazos y piernas, que se cuenta que parecían un "mafá". Los informes alegan que los besos eran tan apasionados, que hasta se querían comer. La foto de este fogoso encuentro fue publicada en el diario digital Tgcom de Italia, con un titular en grande que decía: "La receta de la felicidad eterna: vacaciones, entretención y mucho sexo”. ¿Recuerdan que hace meses la espectacular Anna y Enrique fueron sorprendidos por un paparazzi en Miami, cuando se acariciaban cálidamente en un banco al borde de la playa? Bueno, él metía las manos bajo la ropa de ella y reaccionaba como una niña con un regaño bastante poco serio. La serie de fotos revolucionó a los cibernautas de Internet, y a la rusa le importó poco. ¡Tienen derecho!
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