HISTORIAS
El paquete

Redacción | DIAaDIA

Se te olvidó, papá, enseñarme a llevar paquetes. ¿Cuándo se contó conmigo en casa? ¿Cuándo tuve que recoger a mis hermanos del colegio?

¿Cuándo tuve que lavar el carro los domingos y arreglar el jardín, recoger las hojas, sacar al perro y lustrar mis zapatos? ¿Por qué no me mandaste a comprar las medicinas a la farmacia o recibir el gas y pagarlo? En vacaciones, ¿por qué no fui a la fábrica a empacar zapatos? ¿Por qué no compré yo solo algo que me gustaba, sin que tú me dijeras qué comprar?

Mamá, ¡se te olvidó ser firme y mandarme, mamá! Más fácil que el chofer y las sirvientas hicieran bien las cosas y sin riesgos, ¿por qué no se arriesgaron a dejarme llevar un paquete? Se les olvidó enseñarme a ser hombre. Ya a los 18 años se me caen las manos. A mí también me da vergüenza. Fíjate que en la universidad nombraron a Roberto delegado del grupo. Dicen que tiene responsabilidad. A Juan lo nombraron coordinador de la excursión del profesor de Historia. Y a Robles lo nombraron capitán de su equipo. Pero Robles desde chico lava el carro de su casa y arregla el jardín, y Roberto recoge a sus hermanas aunque tenga mucha flojera. Y a tu hijo lo dejaron sin paquete. Dicen que no tengo responsabilidad.

Se te olvidó, papá, enseñarme desde chico a cargar paquetes aunque me enojara y les dijera que eran injustos. Mi voluntad se quedó raquítica con tantos pretextos.

No se olviden, papás, de entrenar a ser hombres y mujeres a sus hijos e hijas. No vaya a ser que no sepan cargar bien el paquete de la vida.

Ciudad de Panamá 
Copyright © 1995-2006 DIAaDIA-EPASA. Todos los Derechos Reservados