¡Tan grandote y con los dedos en la boca! Le apuesto que por lo menos un sinfín de veces ha escuchado decir esto.

PARA MEDITAR

Aunque es sabido por todos que en la infancia es cuando adquirimos aquellos "malos hábitos" que son algo difíciles de olvidar, también pasa que al llegar a la edad adulta vamos tomando algunas acciones un tanto desagradables, que llegan incluso a incomodar a los demás. La más frecuente de éstas es meterse los dedos a la boca, aunque a veces se tiene el vago pretexto que es para comerse las uñas, la mayoría de las personas lo hacen instintivamente y casi sin notarlo, llegando a comerse hasta las cutículas, lo que provoca malformaciones en las manos, de las que más adelante nos arrepentimos.

CAUSAS

La razón más conocida para este mal hábito es el nerviosismo, aunque también influye mucho la impaciencia y el estrés.

A pesar de que es muy común que las personas sientan estas reacciones, es necesario que también recuerde que introducirse los dedos en la boca se ve muy mal, y aunque sea por apariencia, debería dejar de hacerlo.

RECOMENDACIONES

Trate de pensar en otras cosas. Si se siente nervioso, relájese. Puede hacerlo platicando con otra persona o moviendo muchos los dedos, así poco a poco se quitará ese mal vicio.

Procure tener recortadas las uñas; si es mujer, téngalas pintadas siempre. De esta manera, procurará no estropear su manicura.