"Ese barco velero cargado de plata cruzó la bahía", es lo que quizás cantará Isabel Pantoja porque no tiene chenchén para pagar la fianza de 3,68 millones de euros (5,17 millones de dólares) que un juez le impuso por estar acusada del supuesto delito de blanqueo de capitales. ¡Chuuuuzo!

Ella hasta podría pagar "cana", o sea cárcel por tres años y medio de comprobarse su culpabilidad.

Pantoja será juzgada en un proceso que emana del llamado "caso Malaya", un macrojuicio por corrupción urbanística y el cargo que se le imputa es "delito continuado de blanqueo de capitales".

Su comparecencia terminó con un tumulto de periodistas y curiosos. Hubo tal zambapalo, que Isabel llegó ante el juez Sergio Ruiz con el vestido roto. ¡Bárbaros!

A la cantante le dieron un día de plazo para depositar la fianza millonaria, es decir que hoy tiene que dar una respuesta. Pero según dijeron fuentes, Pantoja no tiene "money" para afrontarla, por ello le serán embargados algunos bienes.

El "caso Malaya" destapó la mayor red de corrupción urbanística en la historia de España y el juicio comenzó el pasado 27 de septiembre en Málaga, con el ex alcalde Muñoz, ex esposo de la artista.

La fiscalía sostiene que la Pantoja, al igual que la primera mujer de Muñoz, "eran perfectamente conocedoras del origen ilícito de los fondos y bienes" que recibieron de Muñoz" y "se prestaron, cada una en su momento, para servir de cobertura al ocultamiento de los bienes y el dinero adquiridos ilícitamente" por él. ¡Qué lío!, ¿Cómo quedará esto?