
Las quemaduras son causa frecuente de accidentes en niños y motivo de consulta a los cuartos de urgencias. Los padres y personas que se dedican al cuidado de los niños deben tomar todas las medidas necesarias para evitar las diversas complicaciones por las que atraviesa un niño quemado, así como las largas hospitalizaciones y hasta la muerte en los casos más graves.
Las quemaduras son lesiones provocadas por agentes físicos (fuego, vapor caliente, líquidos calientes, electricidad, solares, productos químicos) que producen o conducen calor, destruyendo la piel parcial o totalmente.
Se clasifican tomando en cuenta la extensión, profundidad y localización de las mismas en:
Quemaduras de Primer Grado: enrojecimiento, edema y dolor de la piel.
Quemaduras de Segundo Grado: enrojecimiento, edema, dolor, vesículas o ampollas. Se extiende a la dermis.
Quemaduras de Tercer Grado: afección de tejidos más profundos de la piel (músculos, tendones, huesos, vasos sanguíneos).
El tamaño de las quemaduras se expresa como porcentaje de la superficie corporal. Para esto se toma en cuenta la edad del paciente y las diferencias anatómicas. Mediante fórmulas utilizadas por el pediatra, se realiza el cálculo del área afectada.
Medidas
Utilice protectores en los tomacorrientes.
Así evitará quemaduras eléctricas.
Limite el acceso a microondas u hornillos.
Datitos
Complicaciones
El paciente con quemaduras severas tiene otras complicaciones asociadas a deshidratación grave, afección de vías respiratorias y complicaciones infecciosas y renales, entre otras.
Amerita manejo en Unidades de Quemados y de Cuidados Intensivos.
En el tema de quemaduras lo principal es la prevención.
Preste atención
Ya se ha enfatizado en publicaciones previas la importancia de la vigilancia y supervisión del menor una vez que va adquiriendo habilidades y destrezas motoras (a partir de que camina).
La cocina debe ser un lugar prohibido para niños pequeños, ya que allí ocurren una gran cantidad de accidentes asociados a quemaduras: halar ollas calientes, envases con agua o líquidos calientes, tocar la puerta del horno caliente, entre otros.
Los niños a partir de los dos a tres años desarrollan curiosidad, por lo que no deben tener acceso a fósforos, encendedores de estufa o velas. Nunca se debe permitir al niño jugar con fuego.
En niños mayores y sobre todo en época de Navidad y carnavales, debe estar rotundamente prohibido el acceso a bombitas, quemadores, fuegos pirotécnicos, etc. No se les debe permitir una participación activa en la tradicional quema de arbolitos de Navidad.
En lactantes, se debe supervisar la temperatura del agua para el baño, así como la temperatura de los líquidos que va a ingerir.
Recuerden que el sol también es causante de quemaduras y deshidratación; de allí la importancia de no exponer al niño al sol en horas pico (de 10 a.m. a 4 p.m.) y utilizar protección adecuada (bloqueadores, gorras, gafas, etc).
Ante la ocurrencia de quemaduras por accidentes caseros, coloque el área afectada bajo una fuente de agua fresca por 15 a 20 minutos para aliviar el dolor. No utilice agua fría ni aplique cremas, ungüentos ni remedios caseros. Se debe remover la ropa si es posible.
Una vez estabilizado el paciente, debe ser llevado de inmediato al Cuarto de Urgencias para evaluación médica.