
El talento lo lleva en las venas.
FOTOS: EVERGTON LEMON
El talento lo lleva en las venas.
FOTOS: EVERGTON LEMON
El talento lo lleva en las venas.
FOTOS: EVERGTON LEMON
Perritos de globos son los favoritos.
Tiene creatividad en sus manos.
Es muy bueno con los niños.
El talento lo lleva en las venas.
FOTOS: EVERGTON LEMON
Perritos de globos son los favoritos.
Tiene creatividad en sus manos.
Es muy bueno con los niños.
El talento lo lleva en las venas.
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Perritos de globos son los favoritos.
Tiene creatividad en sus manos.
Es muy bueno con los niños.
El talento lo lleva en las venas.
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Perritos de globos son los favoritos.
Tiene creatividad en sus manos.
Es muy bueno con los niños.
El talento lo lleva en las venas.
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Perritos de globos son los favoritos.
Tiene creatividad en sus manos.
Es muy bueno con los niños.
Siempre les saca una sonrisa. Esta es, sin duda, la principal característica de Jonathan González, un joven que desde pequeño le gustó la creación de muñecos con globos y actos de magia para hacer reír a las personas.
Vestido con un atuendo gracioso y colorido, este joven llega a los lugares que le destina la empresa Cataplum, donde labora hace años y, de inmediato, se pone a trabajar con su artillería de bromas y muecas que solo él sabe hacer.
A pesar que las personas a veces dicen que ser animador de fiestas no es una profesión, afirmó lo contario, pues es un arte que va por dentro y no cualquiera lo puede hacer bien, sin embargo, su trabajo es como todos, ya que labora hasta más de ocho horas y fines de semana, con la diferencia de que recibe dos sueldos: el efectivo y los aplausos de su publico.
Lo mejor del mundo
Una vez González tuvo la oportunidad de animar una fiesta de niños con cáncer que le llegó al corazón, ya que, ver cómo sus actuaciones le alegraban la vida a esos pequeños, le recordó por qué escogió ser animador.
Más facetas
Además de animador el actúa como mimo, payaso y zanquero, está última actividad le dejó una experiencia desagradable, pues justo al salir de una boda, uno de los zancos se quebró y quedó regado en medio de la celebración, pero se levantó y siguió con el acto, puesto que eso forma parte de su profesionalismo.
Su metas son crear su propia empresa de animadores y ser independiente, no obstante, se requiere de mucho trabajo y paciencia, así que seguirá trabajando poco a poco en su meta.