Muchos estudiantes y empleados universitarios se quedaron esperando el "guacho santo", pero como a buen hambre no hay pan duro, se tuvieron que conformar con un té de hierba de limón y galletas de sal.

Ese fue el menú que ofrecieron ayer los miembros de la Asociación de Empleados de la Universidad de Panamá (ASEUPA), quienes prepararon ese té en menos de lo que canta un gallo; sin embargo, les costó prender el fogón. Todo esto ocurre los martes, miércoles y jueves en la entrada principal de la Universidad de Panamá.

Los miembros de ASEUPA, para complementar su protesta contra el alza de los productos de la Canasta Básica Familiar, confeccionaron un ataúd y dentro colocaron a uno de sus adeptos.

Ese "cajón" representaba al pueblo. A un costado del féretro, el siguiente mensaje: "Gracias a los comerciantes especuladores. Aquí yace el pueblo".

Esta vez no hubo coplas de tamborito, sino que la manifestación fue animada por una alegre murga, donde hasta el individuo disfrazado de la muerte tiró un par de pasos.

Damián Espino, secretario general de la organización, expresó que no se hizo el "guacho santo" porque no hay plata ni para eso.

Adelantó que para hoy repartirán cool-aid con pan. Sin mantequilla, ni nada. Además, prepararán una olla común de sopa de huesos de vaca, para todo el que guste, y agregó que tendrán una sorpresa adicional para cerrar la última protesta de su colectivo durante esta semana.

EL MENU

El martes prepararon 37 sobres de sopa china y comieron unas 250 personas.