Un viaje que muchos no han hecho y quieren vivir. Una travesía en barco por las exclusas de Miraflores de nuestro majestuoso Canal de Panamá, rompió la rutina de algunos panameños ayer.

Profesores de diversas facultades de la Universidad de Panamá tuvieron esta agradable experiencia, como parte de una visita educativa a la Autoridad del Canal de Panamá. En su mayoría, los docentes acudían por vez primera a la cita, al igual que personal de DIAaDIA que se deleitó con tan fascinante aventura, en un lapso de 2 horas y 30 minutos.

El buque escuela Atlas, construido en 1934, fue el transporte para los novatos en estas lides. El viaje zarpó del atracadero de Diablo, en el Pacífico, con dirección al Mar Caribe, hasta pasar las exclusas de Miraflores y regresar.

Durante el trayecto se puede observar un hermoso paisaje natural, conjugado con la maravilla que posee nuestro istmo: el Canal de Panamá.

No es lo mismo verlo en televisión que observarlo con sus propios ojos. Ver cómo abren las compuertas, entra el barco y cierran nuevamente, para luego por medio de 200 millones de litros de agua, subir o bajar 8 metros (dependiendo de la ruta), hasta quedar al nivel del mar, es algo que no tiene precio.

Por eso se dice que el que no conoce su país no lo quiere. Muchos desearían vivir la experiencia, pero por una u otra razón no han podido. La travesía cuesta 120 dólares por persona; los estudiantes, docentes y particulares pueden solicitarlo a la ACP con anticipación. Jaime Robleto, guía de la ACP, dijo que los cruceros y barcos de guerra tienen prioridad sobre los demás. Un promedio de 37 barcos al día pasan por la vía Interoceánica.