Faustina sufre de esquizofrenia, por eso los dueños de los locales que reparan llantas se encargan de cuidarla y vigilarla. (Foto: Carlos Ortega / EPASA)
Jesús Simmons
| DIAaDIA
"Mi viejo colchón". Ese es el tesoro más preciado de Faustina Rodríguez, quien a sus 53 años vive al lado de un local de reparación de llantas en El Valle de San Isidro.
Con una sonrisa en su rostro nos encontramos a Faustina tomando un descanso en un maltrecho colchón puesto sobre unas llantas de auto.
Cuenta que trabajaba en el Hogar San José, con las monjitas, en donde realizaba labores de limpieza y le daban la comida.
Los dueños del establecimiento dijeron que la señora un buen día se apareció por allí y se quedó viviendo y de eso ya han pasado ocho años.
Contaron que la dama sufre de esquizofrenia y por eso deben estar pendiente de su cuidado, pero duerme sola afuera del local.
A pesar de vivir en la calle, el pequeño espacio que ocupa lo tiene bien arreglado y hasta tiene un cuadro de "Santa Claus" colgado sobre una tabla.
Según Faustina, sus hijos trabajan, pero lo cierto es que al hablar se nota que no está del todo coherente, hasta alega que compró la cuadra donde vive.
Mientras esté aquí la seguiremos cuidando y nada le va a pasar, dijeron los llanteros.
Ella es oriunda de Las Palmas de Veraguas.
HOGAR
En la calle principal de El Valle vive Faustina, allí todos la quieren y se preocupan por su bienestar.