
Momentos en que Ricardo iba a recibir su terapia. Estaba impaciente por subir en el lomo de “Caramelo”.Foto: JESÚS SIMMONS
Momentos en que Ricardo iba a recibir su terapia. Estaba impaciente por subir en el lomo de “Caramelo”.Foto: JESÚS SIMMONS
Momentos en que Ricardo iba a recibir su terapia. Estaba impaciente por subir en el lomo de “Caramelo”.Foto: JESÚS SIMMONS
“Las terapias son de mucha ayuda para los niños y los ayuda a tener más movilidad en su cuerpo”.
M. de González
“Él tiene más control de su cuerpo y también le ha ayudado para mejorar su respiración”.
Dilia Henríquez
Evelyn Ortega
Los niños siguen al pie de la letra las instrucciones.
Disfrutan cada momento de la terapia.
Momentos en que Ricardo iba a recibir su terapia. Estaba impaciente por subir en el lomo de “Caramelo”.Foto: JESÚS SIMMONS
“Las terapias son de mucha ayuda para los niños y los ayuda a tener más movilidad en su cuerpo”.
M. de González
“Él tiene más control de su cuerpo y también le ha ayudado para mejorar su respiración”.
Dilia Henríquez
Evelyn Ortega
Los niños siguen al pie de la letra las instrucciones.
Disfrutan cada momento de la terapia.
Momentos en que Ricardo iba a recibir su terapia. Estaba impaciente por subir en el lomo de “Caramelo”.Foto: JESÚS SIMMONS
“Las terapias son de mucha ayuda para los niños y los ayuda a tener más movilidad en su cuerpo”.
M. de González
“Él tiene más control de su cuerpo y también le ha ayudado para mejorar su respiración”.
Dilia Henríquez
Evelyn Ortega
Los niños siguen al pie de la letra las instrucciones.
Disfrutan cada momento de la terapia.
Momentos en que Ricardo iba a recibir su terapia. Estaba impaciente por subir en el lomo de “Caramelo”.Foto: JESÚS SIMMONS
“Las terapias son de mucha ayuda para los niños y los ayuda a tener más movilidad en su cuerpo”.
M. de González
“Él tiene más control de su cuerpo y también le ha ayudado para mejorar su respiración”.
Dilia Henríquez
Evelyn Ortega
Los niños siguen al pie de la letra las instrucciones.
Disfrutan cada momento de la terapia.
Momentos en que Ricardo iba a recibir su terapia. Estaba impaciente por subir en el lomo de “Caramelo”.Foto: JESÚS SIMMONS
“Las terapias son de mucha ayuda para los niños y los ayuda a tener más movilidad en su cuerpo”.
M. de González
“Él tiene más control de su cuerpo y también le ha ayudado para mejorar su respiración”.
Dilia Henríquez
Evelyn Ortega
Los niños siguen al pie de la letra las instrucciones.
Disfrutan cada momento de la terapia.
Los niños, a través de la terapia y el contacto con el caballo, reciben sensaciones que influyen positivamente en el sistema sensorial y motor de su desarrollo.
Annie Bernal, madre de Ángela, manifestó que su hija tiene dos años de acudir a las terapias y que antes la niña no podía sostenerse al no tener un buen equilibrio y se caía. “Ahora ella camina y he visto claramente su mejoría”, aseguró.
Annie viaja dos veces a la semana desde Mano de Piedra, San Miguelito, al Centro Agropecuario Jorge A. Cortés en Villa Unida de Chilibre a llevar a su hija y admite que no es fácil, pero haría lo que fuera por ver mejorar cada día a su hija.
La Pista Estatal de Equinoterapia beneficiará a más de 300 niños al mes.
Desesperados estaban los niños para subir al caballo, pues durante los 45 minutos hacen calentamientos, les enseñan los colores y al final bajan relajados. Ellos están acompañados por un fisioterapeuta, su acudiente y otra persona que mantiene el control del caballo.