Las letras y las dulces melodías se hicieron presentes en un concierto hecho para las almas sensibles. José Luis Perales nos trajo el amor en forma de canción y el público le correspondió, ya que cantaron todas las canciones que nos han hecho soñar.

El concierto arrancó con nuestra Latin American Idol, Margarita Henríquez, quien interpretó cuatro temas, entre ellos, Cuando suba la marea, balaba que ha ocupado desde su salida al mercado los primeros lugares en la preferencia del público.

A las 8:50 p.m. se escuchó una gran ovación y no fue para menos, ya que entró al escenario José Luis Perales, quien interpretó “Me llamas” y todos inmediatamente lo acompañaron, demostrando que en Panamá son fanes Nº 1 de este cantautor español.

De allí en adelante salieron de la garganta de Perales sus mejores éxitos y lo que más nos gustó es que podíamos cerrar los ojos y era como si estuviéramos escuchando el CD, ya que su voz está tan clara como hace 35 años cuando empezó su fructífera carrera.

Amor sin límites, La llamaban loca, Amada mía, Quisiera decir tu nombre, América, Y te vas, formaron parte del primer grupo de canciones que todos gozaron.

El ambiente estaba tan lleno de romanticismo que casi todos los presentes acompañados por sus parejas, se tomaban de las manos y se lanzaban miradas cómplices.

El artista no dejó de conversar con el público y le dijo que estaba feliz de regresar a Panamá, ya que tenía más de 20 años sin visitar nuestra tierra y que la última vez que lo hizo fue para un concurso Señorita Panamá, por lo que agradeció que lo hayamos traído de vuelta.

Pero no crean que terminaron las melodías, pues siguieron otras canciones como Celos de mi guitarra, Canción de Otoño, El amor, Que canten los niños, tema de la organización Aldeas Infantiles SOS, asociación a la que apoya continuamente y a la que le regaló este tema.

Y por supuesto, no podía faltar Balada para una despedida, Te quiero y, para cerrar con broche de oro interpretó ¿Y cómo es él? y Un velero llamado libertad. El público definitivamente se fue complacido.