Ahora vivirán mejor. Luego que DIAaDIA publicara la precaria situación en que vive Yaremis Martínez Ureña, de tan solo tres años, las donaciones no se hicieron esperar.
La pequeña, que reside en Santa Catalina de Churuquita Chiquita, en Coclé, en una casa de quincha, es una de las tantas víctimas que fueron envenenadas con dietilenglycol.
Ante el panorama tan tenebroso, el Ministerio de Vivienda (MIVI) y el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) le regalaron alimentos, frazadas, juguetes, estufa y otros enseres.
Pero lo más importante es que Yaremis no tendrá que vivir más en aquella casa de quincha, porque pronto el MIVI le construirá una casa nueva.