La provincia amanece hoy en calma, luego que a últimas horas de anoche un cura católico lograra que el pueblo y las autoridades acordaran una tregua.

Desde el jueves, la conocida "Y" que une las vías que vienen y van desde Almirante, Changuinola y Chiriquí Grande, estaba tomada por la población, que impedía el paso de camiones de la bananera y todo tipo de vehículos. La provincia ya estaba desabastecida.

A pesar de la aparente paz de hoy, el saldo de cuatro días de bloqueo de calles es muy alto: quince policías heridos con piedras y palos, dos ciudadanos detenidos, manifestantes lesionados y afectados con gases lacrimógenos, autos estatales en llamas, y más de 22 mil cajas de banano perdidas.

Nada más ayer, a las seis de la mañana, cuando el sol todavía no había salido del todo, cientos de policías irrumpieron en Almirante disparando.

PETICION

La protesta se originó, entre otras cosas, para que el Gobierno obligue a la bananera a bajarles el precio de la luz.