
Humberto y Vielka, padres de los niños.Foto: ROBERTO BARRIOS
Humberto y Vielka, padres de los niños.Foto: ROBERTO BARRIOS
Humberto y Vielka, padres de los niños.Foto: ROBERTO BARRIOS
Humberto y Vielka, padres de los niños.Foto: ROBERTO BARRIOS
Humberto y Vielka, padres de los niños.Foto: ROBERTO BARRIOS
Humberto y Vielka, padres de los niños.Foto: ROBERTO BARRIOS
Humberto y Vielka, padres de los niños.Foto: ROBERTO BARRIOS
Los vecinos se reunieron en la casa de los niños y cantaron alabanzas para despedir a los hermanitos.
Humberto, el padre de los niños, tuvo que ser consolado, pues su dolor se reflejaba a través de su llanto desconsolado, ya que días antes del accidente soñó con dos ataúdes blancos como en donde ahora estaban sus dos primeros hijos. La ceremonia se efectuó en la iglesia cuadrangular “Heme Aquí”, en donde niños y adultos recordaron que los hermanitos Bustamante siempre estaban prestos a escuchar la palabra de Dios.
Se conoció que el sábado pasado, “El Laguito” fue rellenado de tierra.