Orlando parece ser un hombre sencillo, no teme conversar con nadie, la fama apenas y lo alcanza. Es todo sonrisa, amabilidad y gran pelotero.

Nacido en Colombia, el 2 de noviembre de 1974, Cabrera, campocorto de los Medias Rojas de Boston, habla perfectamente el español y ahora el inglés, pero su máxima virtud se debe al público, por lo que es accesible en todo momento, pese a las inclemencias del tiempo en el estadio Fenway Park.

Él habló con EPASA, minutos antes de comenzar el partido número dos contra los Cardenales de San Luis por la corona de la Serie Mundial de esta temporada, que se disputa al mejor de siete.

Cabrera primero se refirió al panameño Ramiro Mendoza, quien quedó fuera del "roster" para esta serie y sólo una lesión y un permiso de las Grandes Ligas podrían activarlo.

"Ramiro es una excelente persona y amigo. No sé cómo lo dejaron por fuera", dijo Cabrera.

Sobre la Serie Mundial, el torpedero colombiano expresó que de ganarla sería como un premio para todos los fanáticos.

Ellos creen en este equipo que es el reflejo de América Latina. "Aquí hay panameños, dominicanos, colombianos y ya no me acuerdo, pero hay jugadores que representan el área latina, por lo que esta serie es del mundo", acotó.

LA OTRA CARA DE LA MONEDA

Hasta este momento Cabrera hablaba muy animadamente, inclusive tomaba el tiempo para tomarse una foto con los aficionados y los periodistas, pero llegó un mal momento... en su rostro se reflejó.

¿Qué te parece la responsabilidad de hacer olvidar a los fanáticos la presencia de Nomar Garciaparra en el campocorto de los Medias Rojas de Boston?

No quiso dar palabra, detalle y se limitó a ingresar al "dogaut". No dijo más nada.