Dicen que murió de tristeza
Ernesto Villar, nieto del occiso, abrió la puerta del cuarto a patadas.(Foto: Alexander Santamaría / EPASA)

Didier Hernán Gil | DIAaDIA

Lo echaron de menos y, al husmear por la ventana, descubrieron su cuerpo inerte tirado sobre la cama completamente desnudo.

Es así como encontraron el cuerpo del ciudadano Cristóbal Asprilla, en la casa 3311, en el sector 32 de Veranillo ayer.

Conocidos del hoy occiso manifestaron que lo vieron por última vez el domingo. Esta vez, lo notaron un poco cabizbajo porque, supuestamente, estaba sentido con su compañera sentimental con la que compartió más de 30 años. Para colmo, ese día su cónyuge ordenó que se le quitara el suministro de energía eléctrica al cuarto donde vivía Asprilla.

A eso de las 9: 00 a.m. de ayer, sus vecinas notaron que habían pasado dos días y la luz del cuarto del fallecido había permanecido encendida. Al fijarse por la ventana, vieron el cuerpo de Asprilla desnudo y con sus manos sobre el pecho. Unidades de la Policía y de la PTJ determinaron que su muerte obedeció a un paro cardiaco.

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