"Para triunfar, sólo hay que tener el deseo y ser perseverante". Estas fueron las primeras palabras de Priscila, a quien encontramos dictándole clases a sus compañeros.

Según sus compañeros, Priscila es ejemplo de perseverancia y les ha demostrado que cuando uno desea algo, siempre debe luchar por ello; además, hay que ser constantes y estar dispuestos a luchar, y se sienten muy orgullosos de ella y de que sea su compañera de salón.

Priscila es una chica muy impresionante, la facilidad de palabra y ese aire de conquistar al mundo entero con su talento, caracterizan a esta joven estudiante de VI año del Colegio Elena Ch. de Pinate.

Esta chica participó en la Cumbre Juvenil de la OEA, celebrada en México, y fue escogida como uno de los tres mejores delegados de ésta. Esta distinción la llena mucho de orgullo, e invita a jóvenes como ella a que tengan sueños; además, exhorta a los padres a que incentiven el ingenio de sus hijos, apoyándolos cada vez que tengan un buen proyecto en mente.

Su padre Manuel Cardales, quien es profesor en el mismo colegio, dijo: "No tengo palabras para describir el orgullo que siento por esta hija, que es una grande entre las grandes".

Su profesora consejera, Miriam Garay, aseguró que Priscila es una excelente chica y todos en el colegio la felicitan y la exhortan a que no deje escapar ninguna oportunidad para triunfar, especialmente, que no cambie su forma de ser, ya que es una de las cosas que la hace especial.

TRIUNFADORA

Ocupó uno de los tres mejores puestos en la Cumbre de la Juventud en la OEA.