El éxito que alcanzó el pelotero Carlos Ruiz en el béisbol mejor rentado del mundo, es algo que debe llenar de orgullo a todos los panameños.

Una vez más, otro humilde hijo de esta prodigiosa tierra del Canal se esforzó al máximo y defendió con garras los colores de nuestro emblema nacional, para llenar de gloria a todo un país.

Es por eso que hoy, siendo identificada como una cronista más que todo de fútbol, decidí hacer un alto en el camino para vitorear la labor de este joven que luchó por salir adelante en un país donde mucho se suele discriminar a los extranjeros.

Lo único que lamento es que, y en eso, estoy segura que muchos coincidirán conmigo, no se le haya otorgado al panameño el premio al Jugador Más Valioso; sino al estadounidense Cole Hamels, quien a mi criterio, no se lo merecía (un partido ganado, no dice mucho). Incluso, considero que habían otros como Ryan Howard y el propio Brad Lidge, quienes merecían ganar ese galardón. ¡Bien hecho, "Calicho"! ¡Que viva Panamá, Meto!