¿Y las promesas?


Cerrar!

Teresa desea que la ayuden con la remodelación de su vivienda y la medicina de sus hijos, porque son muy caras. Foto: JESÚS SIMMONS

  • ¿Y las promesas?

    Teresa desea que la ayuden con la remodelación de su vivienda y la medicina de sus hijos, porque son muy caras. Foto: JESÚS SIMMONS

  • ¿Y las promesas?

    Estas son las escaleras que sube Teresa.

  • ¿Y las promesas?

    Necesitan un abanico para Adrián.

  • ¿Y las promesas?

    En esta casa vive Teresa con sus hijos.

  • ¿Y las promesas?

    Teresa desea que la ayuden con la remodelación de su vivienda y la medicina de sus hijos, porque son muy caras. Foto: JESÚS SIMMONS

  • ¿Y las promesas?

    Estas son las escaleras que sube Teresa.

  • ¿Y las promesas?

    Necesitan un abanico para Adrián.

  • ¿Y las promesas?

    En esta casa vive Teresa con sus hijos.

  • ¿Y las promesas?

    Teresa desea que la ayuden con la remodelación de su vivienda y la medicina de sus hijos, porque son muy caras. Foto: JESÚS SIMMONS

  • ¿Y las promesas?

    Estas son las escaleras que sube Teresa.

  • ¿Y las promesas?

    Necesitan un abanico para Adrián.

  • ¿Y las promesas?

    En esta casa vive Teresa con sus hijos.

  • ¿Y las promesas?

    Teresa desea que la ayuden con la remodelación de su vivienda y la medicina de sus hijos, porque son muy caras. Foto: JESÚS SIMMONS

  • ¿Y las promesas?

    Estas son las escaleras que sube Teresa.

  • ¿Y las promesas?

    Necesitan un abanico para Adrián.

  • ¿Y las promesas?

    En esta casa vive Teresa con sus hijos.

  • ¿Y las promesas?

    Teresa desea que la ayuden con la remodelación de su vivienda y la medicina de sus hijos, porque son muy caras. Foto: JESÚS SIMMONS

  • ¿Y las promesas?

    Estas son las escaleras que sube Teresa.

  • ¿Y las promesas?

    Necesitan un abanico para Adrián.

  • ¿Y las promesas?

    En esta casa vive Teresa con sus hijos.

Jesús Simmons - DIAaDIA

Promesa incumplida. Dice un refrán muy sabio: “No le debas a pobre”, lamentablemente, este dicho lo tiene clarito en su memoria Teresa Angulo, de 25 años, residente en la 9 de Enero, San Miguelito.

Su hija Lian Castillo, de cuatro años, padece de hidrocefalia (acumulación excesiva de líquido cefalorraquídeo), este es un líquido transparente que rodea el cerebro y la médula espinal. La pequeña también sufre de retraso psicomotor.

Sus problemas no acaban, ya que su otro hijo, Adrián Cuello, de seis años, sufre del síndrome de West (encefalopatía, alteración cerebral epiléptica de la infancia, grave y poco frecuente). Por su enfermedad, el niño permanece todo el día acostado, no habla y solo sonríe cuando sus padres le hablan con dulzura.

La casa donde vive Teresa es muy humilde, además tiene que subir más de 100 escalones para poder llegar a la carretera principal con su hijo en brazos.

El techo de la vivienda no está en muy buenas condiciones, por eso cada vez que llueve se le mojan todos sus enseres. La única entrada económica es la de su esposo Luis Castillo, de 35 años, quien labora como guardia de seguridad en un edificio en Villa de las Fuentes # 1 en Betania.

Lo que más les molesta a esta humilde familia es que a raíz de un reportaje que le hicieron en el 2009, el Ministerio de Vivienda (MIVI), les prometió una vivienda.

Según Teresa, le prometieron el cielo y la tierra y nada de eso cumplieron. A su esposo le dijeron que lo iban a nombrar en el Servicio Nacional de Migración y tampoco fue cierto.

 
suscripciones