Los actos programados en el Cementerio Municipal de Santiago en honor al Día de los Difuntos fueron atrasados por la lluvia, que desde tempranas horas de la mañana empezó a caer.

Las personas que acudieron al panteón para orar ante las tumbas y bóvedas de sus seres queridos, que reposan en este campo santo, se mojaron, pese a cubrirse con lo poco que podían.

Entre tanto, en Coclé, con una misa en la Catedral San Juan Bautista, la peregrinación al cementerio y la colocación de ofrendas florales se realizaron los actos de este día en Penonomé.

La profesora Leyda M. de Guardia, oradora oficial de los actos protocolares, expresó la importancia que se debe tener al recordar a los difuntos, ya que cada uno de ellos ha hecho patria en algún momento.

MUY VISITADO

Mientras que en Aguadulce, gran cantidad de personas visitaron a sus familiares enterrados en el Cementerio Municipal.

Desde tempranas horas se podía ver a las personas caminando con flores por las principales calles del distrito con dirección al cementerio.

A eso de las 8:00 de la mañana se dio inicio a la eucaristía en la Iglesia San Juan Bautista, de Aguadulce, en honor a los difuntos. Luego, a las 9:00 de la mañana, salió el desfile hacia el lugar de descanso eterno.