Yo no sé si usted se levantó a las cinco de la mañana a ver la transmisión en directo de las dianas que nos ofrecía SERTV. Yo no, sin embargo, a una mente brillante en Telemetro Reporta se le ocurrió retransmitirlas por espacio de casi treinta minutos al finalizar el noticiario en la mañana y usted no sabe la delicia que fue verlo sin edición, sin producción y con los movimientos característicos de cámara de una cobertura propia de calle. Era como estar en las mismas escalinatas de la Presidencia. Esto es bueno porque desde hace años se dan las dianas en el Palacio de Las Garzas y siempre los noticiarios nos ofrecían resúmenes de un minuto de este acto tan alegre y que este año, por alguna extraña razón, se veía a la gente y músicos disfrutándolo como nunca.
Y es que a mí nunca me ha gustado ver la transmisión de los desfiles patrios por televisión, porque por años siempre han sido lo mismo, planas, sin ritmo, sin producción y sí, aburridísimas. Antes se daba una unión de presentadores de varios canales de televisión e historiadores en cadena nacional y mientras el experto se limitaba a darnos la parte histórica, los presentadores solo leían las sinopsis de los colegios y todo lo demás era pan con lo mismo. Quizá esa fórmula en su momento funcionó o guste aún a algunos, pero hoy que la televisión, para bien o para mal, se ha convertido en ‘infoentretenimiento’. No es tan agradable a la vista y mucho menos fácil mantener a una audiencia viendo casi lo mismo por más de ocho horas. Los medios electrónicos lo saben y por eso, desde hace unos cinco años, sobre todo, con la competencia de televisión por cable, las transmisiones dejaron de ser una institución en las fiestas para ser lo que el canal crea conveniente.
La prueba es que hasta el momento de escribir esta columna, cada canal hizo lo que le dio la gana. Esto fue lo que vi: TVN, por ejemplo, se unió a la señal de SERTV y entre pasarnos comerciales y el desfile, así se fueron. RPC, Tele7 y TVMax se dedicaron a transmitirnos programación regular entre dibujos animados y series. Canal 11, como señal oficial, transmitió los desfiles e incluyó cápsulas históricas dentro de la transmisión. Telemetro transmitió los desfiles con señal propia y por minutos la de SERTV y tenían en Catedral a Ángel Sierra Ayarsa y en la vía España, a José Garibaldi, nada alterador. Aquí es resaltable que dentro de la transmisión del desfile y temprano, ellos no dejaron de darnos información como por ejemplo, cuando suspendieron la transmisión para dar pase a sus estudios donde hacían contacto con Soná, lugar donde se daban inundaciones y deslizamientos de tierra, inclusive, entrevistaron de primero a las autoridades. TVN reaccionó después e hicieron lo mismo con dos de sus damas periodistas en Presidencia. Canal 21,
nos presentó entre un ‘A Gusto’ (viejo) y la señal de Canal 11; Canal 33 programación regular (vieja) y Canal 35 se sumó a la señal de SERTV, pero con presentadores propios. En conclusión, pan con pan. No voy a mencionar las barbaridades que escuché de colegas porque hasta Manuel Amador Guerrero se retorcería en su tumba, se pararía y saldría huyendo.
De todo lo que he visto hay proyectos que aplaudir. Los departamentos de promociones de TVN y Telemetro nos presentaron bonitas campañas institucionales para resaltar este mes. TVN apeló a sus talentos y a decirnos ‘Panamá es tuyo, es mejor’. La de Telemetro está hermosa porque los niños de Semilla de Cantores envían un lindo mensaje y, junto a los participantes de Cuna de Acordeones, Massiel Rodríguez y Juan Torrente vestidos con uno de los trajes típicos, nos dicen contundentemente que son la pantalla que en este mes de la patria tiene el más importante proyecto folclórico al aire. Yo hubiese esperado de SERTV, siendo Marisín Luzcando su Directora General y la que creó -cuando estaba en MEDCOM- hermosas campañas ganadoras de premios internacionales, una campaña que nos pusiera los pelos de punta. Una campaña nacional donde todo el panameño se sintiera orgulloso no solo de verla, sino de ser panameño. Una campaña que apelara a rescatar ese amor real a la patria, ese amor que se demuestra con trabajo honrado, siendo mejor ciudadano, mejor funcionario público, mejor persona. En esto, SERTV me decepcionó.