Engalanaron la ciudad. En el desfile alusivo al Día de la Bandera, preparados con paraguas, capotes y jacket, estuvieron los espectadores que se aglutinaron a lo largo de la Vía España y de San Felipe para esperar las delegaciones estudiantiles y las bandas independientes que a diferencia del martes, se aguantaron un sol que "picaba".

EN VIA ESPAñA

Le correspondió a la Escuela Artes y Oficios Melchor Lasso de la Vega abrir los desfiles como centro escolar, seguido de los estudiantes del Instituto Panamericano (IPA), quienes marcharon al son de su banda de música.

Minutos más tarde una leve lluvia cayó, pero lo más cómico es que no fue sorpresa para las personas, porque abrían sus paraguas y como si nada seguían observando el desfile. Quienes se la pasaron de un extremo a otro fueron aquellos padres de familia, que estaban pendientes de que a sus hijos no les faltara agua.

TURISTAS

Era evidente observar a los turistas tomar fotografías de las empolleradas, los diablicos y cuanto atuendo típico llamara la atención. Quienes estaban de pie en la acera de Vía España eran los esposos Roberto Ortega y Claudia Ávila, quienes viajaron desde el México D.F. a Panamá. Ellos manifestaron que es muy bonito la forma en que los panameños, en especial los estudiantes, le rinden honor a la patria. "Es bueno que exista en la sociedad ese deber moral con la patria. Se ve que las delegaciones estudiantiles tuvieron que prepararse por meses", adujo Ortega.

De acuerdo con reportes de la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP), más de 400 canadienses llegaron a Panamá y conocieron la ciudad, las playas, el Canal, parques nacionales durante estos días de asueto. Los turistas que llegaron en charters de Sun Wing y Transat son los primeros que llegan en una temporada de noviembre al mes de abril que suman más de 100 vuelos y 25, 000 turistas.

SAN FELIPE

En tanto que, en San Felipe la cosa también estuvo buena, pues esta vez las delegaciones sí pudieron lucirse con sus mejores galas.

Unas de las más gustadas fueron las empolleradas del Instituto América, quienes recibieron aplausos y ovaciones de los presentes.

A pesar de lo largo de la ruta, los estudiantes no decayeron, pues hasta el final del desfile mantuvieron su formación demostrando su espíritu patriótico. Eso sí, apenas terminaban corrían a buscar un refresco, comida y hasta a quitarse las botas, ya que los pies no daban para más.