Una denuncia penal fue puesta ayer en el Ministerio Público contra las autoridades que custodian la cárcel Nueva Esperanza de Colón, luego de que el pasado 17 de octubre falleció Faustino Acosta, producto de una enfermedad, según su familia, por no recibir atención médica.
Su abogado, Gonzalo Moncada Luna, afirmó que la familia suplicó por la atención del recluso que no pagaba condena, pues estaba allí para investigación y aun así, lo dejaron agonizar para entonces ayudarlo.
El hombre, luego de morir, fue declarado inocente por la fiscalía de turno, lo que según Moncada, dejó claro la pésima actuación de las autoridad en declarar inocente a un cadáver. Lo más triste es que una niña quedó en la orfandad, pues su padre, que era pescador, era su único sustento; ahora exigen una investigación del caso.
Actualmente, queda de parte de las autoridades del Ministerio Público investigar el caso.