Cándida Rodríguez, de 70 años, residente en cabuya de Antón, murió aplastada por una pared.
La anciana estaba lavando su ropa en la parte de atrás de su casa de quincha y no se percató de que la pared debilitada por los años y le cayó en la espalda.
El hecho se registró en horas de la tarde. Los funcionarios del Ministerio Público realizaron el levantamiento del cadáver, ante la mirada de asombro de familiares y vecinos.
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