Quién diría que el Alcorcón llenaría el Santiago Bernabéu. Quién diría que Manuel Pellegrini pondría su prestigio en juego en buscar una remontada épica, cual si fuese el rival el Liverpool o la Juventus.
Pues sí. Hoy la ciudad de Madrid, que ayer estuvo de fiesta y feriado, vivirá un clásico impensable, cuando la historia de cenicienta pueda llegar a su final con la campanada de las 12, o continuar situando en la humillación al proyecto multimillonario de Florentino Pérez.
Tras la goleada en la ida 4-0, el conjunto blanco tendrá que buscar ganar por cinco goles y evitar que le marquen uno solo, que valdría doble, esta noche (2:00 p.m. en Panamá).
LOS TECNICOS
El técnico chileno, a mando del Madrid, destacó ayer a los medios que "es imposible adivinar cómo va a venir el Alcorcón, tenemos que salir con convencimiento y con mucha intensidad, lo que hay que demostrar es voluntad y juego, en el fútbol no hay razón ni lógica, hay un espíritu y una intención de ir a buscar el partido".
Pellegrini matizó que su obligación "es salir a por el resultado y ojalá se dé, pero la palabra obligación es muy difícil en el fútbol". Mientras otra vez se armó la polémica por dejar fuera a Guti (a la prensa madridista este tema le encanta).
El Madrid viene en crecimiento de fútbol, mostrando grandes primeras partes y casi mediocres segundas. Por su parte, Juan Antonio Anquela, técnico del Alcorcón, luce tranquilo, sabe que lleva en los bolsillos cuatro goles a favor. "Lo normal es que nos machaquen, pero...", deja entrever este adiestrador, que sabe que es posible.
HISTORICO
Hoy podría ser un gran día para una pequeña ciudad al sur de Madrid o el renacer del orgullo blanco.